Número: TR 0 Azuzar al Toro

Nombre: Confrontar, Azuzando al Toro

El término Azuzar al Toro significa encontrar ciertas acciones, palabras, frases, gestos o temas que causen que el estudiante que hace el ejercicio se distraiga y reaccione a lo que hace el adiestrador. La expresión Azuzar al Toro se deriva de un deporte inglés y español de azuzar, que significa incitar a los perros para que ataquen a un toro encadenado.

Se encontrará que las personas tienen ciertas cosas que les hacen reaccionar de cierta forma. En Scientology, a esto lo llamamos botón: un ítem, palabra, frase, tema o área que causa una respuesta o reacción en la persona.

Por ejemplo, el adiestrador dice algo así al estudiante: “Tienes unas orejotas”. El estudiante reacciona riendo sin control. Así el adiestrador encontró un botón en ese estudiante. Esto es azuzar al toro.

TR 0 Azuzar al Toro

En las fotografías de arriba, el adiestrador le encuentra un botón al estudiante (1) y le indica falla por no seguir confrontando (2). Vuelve a iniciar el ejercicio y repite la frase que lo hizo reaccionar (3), repitiéndolo hasta que el estudiante puede confrontarlo cómodamente, sin reaccionar a él (4, 5, 6).

Sigue azuzando al toro, tratando de encontrar otro botón. Cuando lo encuentra (7) le indica falla al estudiante y le da la razón de la falla (8) y procede a agotar el nuevo botón.

Órdenes: Adiestrador: “Comienza”, “Eso es todo”, “Fallo”.

Posición: El estudiante y el adiestrador se sientan uno frente al otro a una distancia cómoda, más o menos a un metro.

Propósito: Adquirir la destreza de ser capaz de sentarse con calma y mirar a alguien sin tensión y sin despistarse, distraerse, o sin que lo que la otra persona diga o haga le haga reaccionar de forma a.

En el ejercicio previo, con el adiestrador simplemente sentado en silencio, un estudiante aprende a confrontar. En el TR 0 Azuzar al Toro, se incrementa aun más la capacidad del estudiante para confrontar, y aprende a que no lo despisten las acciones del adiestrador.

Esto aumenta la capacidad para estar ahí y enviar una comunicación a otra persona, en cualquier situación social o de la vida, sin que nada lo distraiga.

Por ejemplo, ¿alguna vez has tenido la experiencia de hablar con alguien y quedarte sin saber qué decir o turbarte cuando la otra persona menciona algún otro tema? ¿Alguna vez has reaccionado de forma incontrolable a algo que otro dijo, aun en contra de tu propia voluntad? Este ejercicio puede incrementar tu capacidad para ser más causativo y tener control sobre todos los aspectos de la comunicación.

Énfasis del entrenamiento: Después de que el estudiante aprobó el TR 0 Confrontar y es capaz de simplemente estar ahí con comodidad, se puede empezar a “Azuzar al Toro”. El adiestrador señala rigurosamente como fallo todo lo que se agregue a estar ahí. En movimientos bruscos, parpadeos, suspiros, inquietud, todo excepto estar ahí, se indica falla de inmediato y se indica la razón. Ella sigue azuzando al toro, tratando de encontrar otro botón. Cuando lo encuentra (7) le indica falla al estudiante y le da la razón de la falla (8) y procede a agotar el nuevo botón.

Fraseología del adiestrador: El estudiante tose. Adiestrador: “¡Fallo! Tosiste. Comienza”. Esto es todo lo que el adiestrador dice como adiestrador.

Fraseología de la persona a quien se confronta: El adiestrador puede decir o hacer lo que sea, excepto abandonar la silla. Sin embargo, el adiestrador debe ser realista al adiestrar, dar condiciones y circunstancias reales que puedan surgir en la vida diaria. El adiestrador no puede tocar al estudiante.

Se pueden encontrar y apretar con fuerza los botones del estudiante hasta que ya no produzcan reacción. Cualquier palabra que no sea de adiestramiento no puede recibir respuesta del estudiante. Si el estudiante responde, el adiestrador actúa de inmediato como adiestrador (y se guía por la fraseología anterior).

El estudiante aprueba cuando puede estar ahí con comodidad sin que lo despiste, lo distraiga o lo haga reaccionar en modo alguno lo que el adiestrador diga o haga, y haya alcanzado un triunfo mayor estable.